El 8 de marzo de 1908 marcó un hito en la historia y un paso importante para la lucha femenina. En la fábrica textil Cotton de Nueva York, 129 mujeres murieron después de alzar la voz en huelga en su trabajo. La razón principal fue la denuncia de condiciones laborales explotadoras, sueldos bajos y exclusión de la vida política. Entre sus demandas estaba la igualdad de condiciones laborales para hombres y mujeres.
Versiones afirman que las puertas de la fábrica se cerraron por orden del dueño para disuadir la huelga, pero la situación escaló trágicamente cuando él incendió la fábrica con las mujeres adentro. El humo que salía, teñido de morado por el color de la tela que se fabricaba, se convirtió en un símbolo importante de la lucha por los derechos de la mujer.
En 1910, el Congreso Internacional de Mujeres Socialistas de Alemania propuso que el 8 de marzo se estableciera como el Día Internacional de la Mujer para honrar a las mujeres que lideraron un movimiento social por la igualdad de derechos.
En 1911, comenzaron las movilizaciones en distintas partes del mundo como Suiza, Alemania, Austria y Dinamarca para dar inicio y apoyar el movimiento que se llamaría Día Internacional por los Derechos de las Mujeres.
No fue hasta 1977 que la Asamblea General de la ONU proclamó el 8 de marzo como una fecha importante para la conmemoración femenina.
En 2017, se llevó a cabo el Primer Paro Internacional de Mujeres convocado por organizaciones feministas, donde participaron alrededor de 40 organizaciones de todo el mundo con el objetivo de visibilizar la violencia machista que sigue vigente.
Para Somos Martina, el 8 de marzo representa un llamado a abrir los ojos y levantar la voz colectiva. Nos unimos a este grito para conmemorar nuestro aniversario y la importancia de la lucha de todas aquellas que decidieron desafiar las reglas de una sociedad machista. Sabemos que las cadenas ya no son de hierro; tenemos las manos unidas para avanzar contra la marea. No hay muralla capaz de frenar nuestro pensamiento. Somos Martina es fuerza desde el interior, el apogeo de la belleza y el empoderamiento femenino. Somos mujeres, somos el canto a la revolución, somos poderosas, SOMOS MARTINA.